
SOBRE ESTE DESTINO
VALORACIÓN GENERAL:
Restaurante situado en pleno corazón de Santiago, junto al Mercado de Abastos y muy cerquita de la Plaza del Obradoiro, por lo que su ubicación es inmejorable. Su terraza invita a sentarte a comer, de hecho nos sentamos a comer, (también porque habíamos reservado).
Un buen amigo nos recomendó que viniésemos a este restaurante y tengo que darle las gracias por la recomendación. A la vez que huyes de la aglomeración que hay en los restaurantes dentro del propio mercado no dejas de estar junto al Mercado de Abastos. Teníamos reserva para las 14’30 horas pero nos presentamos a las 14’00h por si podíamos sentarnos antes y poder tomar una caña fresquita antes de comer. Nos facilitaron la mesa al instante en la terraza, a la sombra de unos buenos toldos que nos protegían del sol de mediodía. El servicio y la atención de su personal excelente y la comida de una calidad superior. Aparte de tener un extremo cuidado con las personas celíacas y poder adaptar casi toda la carta para ellas. Sirva como ejemplo que uno de los platos que pedimos se sirve con patatas fritas y de entrada nos dijeron que una de las freidoras se había estropeado y que no podían servir este plazo ya que existía posibilidad de contaminación cruzada al haber una persona intolerante al gluten. Al cabo de un minuto vino la camarera y nos dijo que desde cocina iban a freír las patatas en una sartén aparte y con aceite nuevo, solo para nuestra mesa.
Como ya he dicho al principio empezamos con unas cañas y algún que otro refresco y ya para comer pedimos una ración de pulpo a feira, otra de mejillones en escabeche, otra de berberechos, raxo adobado con huevos y patatas y por supuesto una de percebes. Todo esto acompañado un un buen vino blanco recomendación del restaurante, (un Godello si no recuerdo mal). Llenos como estábamos pedimos los cafés y nuestra sorpresa fue que no sirven café, pero nos recomendaron una cafetería al girar la esquina, en el Ratiños, en el que puedes pedir muchísimos tipos de café e infusiones.
En lo que respecta a la cuenta, absolutamente nada que objetar dado el servicio, la ubicación y la calidad y la frescura de los platos que nos sirvieron.
- Atractivo: 4/5
- Calidad: 5/5
- Atención: 5/5
- Limpieza: 5/5
- Situación: 5/5
- Relación Calidad/Precio: 4/5
SOBRE ESTE DESTINO
POSITIVO
- Situado en el casco histórico de Santiago, junto al Mercado de Abastos.
- Lugar agradable y confortable y mesas espaciosas. Tiene terraza exterior.
- Calidad excelente, trato y servicio excelente y apto para personas celíacas. Relación calidad/precio excelente.
NEGATIVO
- Difícil comer o cenar si no reservas previamente.
- Muchas personas pidiendo dinero mientras comes.
- No sirven café ni infusiones.
COMENTARIOS:
Restaurante totalmente recomendable y más si vas con personas intolerantes al gluten. El servicio y la atención del personal muy muy buena, productos frescos de calidad y comida casera. Si a todo lo anterior le sumas que su carta está prácticamente adaptada para personas celíacas, su ambiente muy agradable, su terraza, su ubicación genial frente al Mercado de Abastos, (en la misma calle), y que la relación calidad/precio es mejor todavía hace que tengamos que recomendar este restaurante si vais a Santiago de Compostela.












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