¿Qué hicimos?

DÍA 1
Recién salidos de un duro y largo confinamiento por culpa de la Covid-19 llegamos a la conclusión que nos hacía falta respirar fuera de nuestras casas y decidimos hacer una pequeña escapada a Formentera, (siguiendo, claro está, todos los protocolos habidos y por haber). El 2 de octubre de 2020, a eso de las 8 de la mañana cogimos el barco de Baleària y en poco más dos horas de viaje estábamos ya en la isla.
Nada mas desembarcar nos fuimos a recoger un pequeño coche que habíamos reservado con anterioridad y directos al hotel. Teníamos la reserva hecha en el Hotel Club Sunway Punta Prima en la playa de Es Pujols. Un hotel muy bien cuidado, delante del mar, con mucha zona verde, piscinas y unas vistas espectaculares. Dado que la habitación no la teníamos todavía disponible dejamos las maletas en recepción y decidimos recorrer un poco la isla por la zona más cercana al hotel, parando en sus calas, sus pequeños pueblos de pescadores para acabar comiendo en un magnífico restaurante, el Can Pasqual, desde luego uno de los mejores restaurantes de la isla y en el que no hay que dejar de probar su arroz negro y las ortiguillas de mar, (todavía se me hace la boca agua).
Después de comer, volvimos al hotel, hicimos el check-in, y aprovechando que empezó a llover decidimos descansar. Cuando pasó la tormenta nos dedicamos a visitar los jardines del hotel, sus piscinas y el resto de instalaciones hasta que llegó la hora de cenar. El día siguiente se presentaba intenso.
DÍA 2
Nos levantamos muy muy temprano, nos íbamos al Faro de la Mola a ver amanecer. Solo 7 personas fuimos ese día a ver la salida del sol. Un espectáculo que habría que ver todos los días. Con las pilas bien cargadas y con mucho frío en el cuerpo, (porque hacía frío después de la tormenta del día anterior), era hora de desayunar, así que cogimos el coche y paramos en el primer bar que vimos abierto. Una vez bien desayunados nos dedicamos a visitar todas las playas, calas, acantilados y puertos que nos fue posible antes de dirigirnos a la capital de la isla, Sant Francesc Xavier, allí visitamos la Iglesia de Sant Francesc, la Capella de sa Tanca Vella, (fuera de uso pero visitable de 10 a 14h.), i el Fossar Vell. El centro de la capital está repleto de bares y restaurantes en los que reponer fuerzas, saciar la sed y apaciguar el estómago. También podréis encontrar multitud de tiendas en las que podréis adquirir desde ropa, (nada barata, por cierto), hasta el típico imán para la nevera, (que es lo que acabamos comprando nosotros). Comimos en el Restaurant Sa Figuera y esperamos hasta que volviesen a abrir los comercios tomando un café en la plaza, en la terraza del Bar Centro.
Seguimos paseando por la capital y llegada la hora nos fuimos hasta el Faro de Cap de Barbaria. Si el amanacer fue espectacular, la puesta de sol, con la isla de Ibiza a la vista fue mejor aún. Una auténtica gozada para la vista y una experiencia digna de repetir cuantas veces fuera necesario. (Imprescindible llevar cámara de fotos).
Ahí terminaba nuestro fin de semana en Formentera. Ya solo quedaba volver al hotel, cenar, y preparar las maletas para volver a casa.
DÍA 3
Volvimos a Denia casi a la hora de comer y pensamos que lo mejor era comer allí, pero decidimos salirnos de lo tradicional y acabamos comiendo en un restaurante japonés, Japijapo Denia. Si os gusta la comida oriental no dejéis de probar su comida, aparte de estar en un ambiente muy relajado y confortable.

Recomendaciones :
- Faro de la Mola.
- Faro del Cap de Barbaria.
- Restaurante Can Pasqual.
- Sant Francesc Xavier.
- Iglesia de Sant Francesc.
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